Reflexiones de fin de año
“La ley corta de las ISAPRES vino a entregar certezas en relación a disminuir el riesgo de colapso en la salud.”
Al finalizar el año 2024, el balance se torna esquivo, a pesar de la entrada en vigencia de leyes que han permitido mejorar las condiciones laborales de los profesionales de la salud privada, como lo son, la Ley Karin y la de reducción a 40 horas laborales.
En la cuenta regresiva del año 2024, para comenzar un nuevo año, el 2025 se nos presenta como la oportunidad de avanzar en la implementación de las leyes, contra el maltrato laboral, Ley Karin, y la de reducción de la jornada laboral a 40 horas.
Lamentablemente, con esta última, con una progresión extensa disminuyendo una hora por año a excepción del segundo año que no hay modificación, solo algunos empleadores entendieron el espíritu de esta ley.
La mayoría de ellos, mostró su peor versión intentando incorporar esta hora en la colación, donde la Dirección del Trabajo cumplió un rol fundamental en ordenar cualquier intento de suspicacia.
Actualización Ley 21.643
Cristian Espinoza Arriagada, Enfermero Clínica RedSalud Vitacura:
El profesional, quien es además, Presidente del Sindicato de Profesionales RedSalud Vitacura, y Representante de FESPROSAP en la mesa de Género del MINSAL, concuerda en que es la capacitación, y la creación de equipos de contención e información, los que evitarán tener casos de mayor envergadura con la ley Karin, de acoso laboral y sexual.
Es su ajetreado desempeño laboral y de representación de los profesionales de la salud, se dio un tiempo para responder una entrevista relacionada con la implementación de la ley en su lugar de trabajo.
¿Qué medidas específicas se han adoptado para garantizar la protección en los lugares de trabajo desde la promulgación de la ley Karin?
La clínica ha dado las facilidades necesarias para realizar capacitaciones por turnos y así conocer sus inquietudes, dudas y la posibilidad de mejorar. Asimismo, se generó un nuevo consentimiento dentro de la empresa que se firma desde el ingreso al servicio de atención de urgencia, en el que se reconoce estar dentro de un lugar libre de violencia.